Desde hace 8 años asesoramos a empresas de tecnología y emprendimientos muy innovadores. En todos ellos vemos 3 errores frecuentes que pueden causar que la viabilidad del negocio corra peligro. Lee esta nota y prestá atención…¿estás cometiendo alguno de estos errores?
ERROR 1: No llevar registro de las operaciones
Muchos emprendedores restan importancia al registro contable de las operaciones diarias de sus negocios y solo llevan en una planilla su gestión. Registrar operaciones, es para algunos emprendedores es una verdadera pérdida de tiempo y sólo conversan con el contador a fines de los cumplimientos legales.
Los emprendedores prefieren invertir todo su esfuerzo en desarrollar su producto o mejorar sus servicios. Claro que esto último es muy importante, sin embargo, sin el registro se pierde información valiosa sobre las operaciones de la empresa: un factor fundamental para construir los indicadores.
En la actualidad existen muchos softwares contables en la nube (Cloud Accounting) que son de muy fácil uso e implementación. Con estos softwares es posible llevar registros contables, elaborar reportes financieros, indicadores de gestión. Al integrar estos softwares con otras plataformas, se organizan los procesos administrativos y de toma de decisiones.
Ventajas de realizar registros contables
- Hacer una medición de margen sobre ventasVer la evolución de tu facturación
- Identificar el punto de equilibrio
- Armar cashflow proyectado
- Evaluar cuales son los costos fijos vs costos variables, etc.
Desventajas de no realizar el registro contable
No llevar las registración contables al día, puede llevar a incumplimientos legales e impositivos, ya sea falta de presentación de declaraciones juradas, balances u otras obligaciones que demandan los distintos entes de contralor, que resultan obligatorios para poder operar cualquier negocio en el país y en el exterior.
En el input de esta información comienza todo el resto de la información, que comúnmente se genera de manera extracontable generando así información inoportuna e incompleta para la toma de decisiones.
ERROR 2: Actuar y después analizar
Sucede frecuentemente que los emprendedores toman decisiones apresuradas que comercialmente a priori son buenas, pero luego terminan ejecutandolas mal por no tener el asesoramiento indicado. Describimos algunos ejemplo:
Una startup necesita desarrollar una plataforma tecnológica con un software factory y no establecen de antemano las horas que lleva cada desarrollo ni los tiempos de entrega de cada etapa.
Algunos emprendedores suelen hacer una mala elección en la estructura societaria del negocio, en lugar de comenzar con estructuras pequeñas (via monotributo o SAS) , invierten en esquemas más costosos (S.A. , Sociedades Holdings en el exterior) que luego no pueden mantener o realmente no cubren las necesidades que demanda el estadio del negocio.
En algunos casos, se comprometen con contratos que luego no pueden cumplir, o bien omiten hacer contratos por falta de asesoramiento.
Otros de los errores comunes es no considerar beneficios fiscales que ofrecen ciertos distritos o alguna industria promocionada como puede ser la Ley de Promoción de Software, no presentar declaraciones juradas de Precios de Transferencia con sociedades vinculadas en el exterior, no firmar contratos de prestación de servicios con desarrolladores freelance, no automatizar algunos procesos administrativos recurrentes que demandan mucho tiempo del emprendedor, etc.
ERROR 3. Costos ocultos en el Plan de Negocios
Muchos emprendedores no sinceran sus costos reales al armar el plan de negocios. Por ejemplo, no se ponen un sueldo, no consideran los alquileres presuntos, los retiros o el uso de celulares. Pero en realidad esos gastos que equivocadamente se toman como “personales”, forman parte del negocio y al omitirlos impactan negativamente en la rentabilidad real.
El peligro de no considerarlos es que esto conlleve a arrojar un status económico y financiero irreal del negocio, peligrando de esa forma la viabilidad del emprendimiento.
Algunas recomendaciones para evitar los tropiezos
El optimismo nos mantiene activos y con perspectivas de crecimiento constante. Pero al armar el plan de negocios es aconsejable ponernos racionalmente pesimistas, a fin de plantear diferentes escenarios para anticiparnos y programar planes de acción ante cada suceso.
Tener en la cabeza las peores posibilidades ayuda a prevenir riesgos que nos tomen por sorpresa y nos encuentre preparados para avanzar a paso firme.
Es importante, para evitar muchos de estos errores, transitar este camino de incertidumbre y cambio constante con contadores y asesores que no solo están especializados en la industria, sino también que tengan una propuesta de valor en sus servicios que sea más parecida a la de un miembro del directorio que a la de un proveedor de servicios tradicional y transaccional. Para lograr esto es fundamental establecer bien las expectativas de ambas partes, que la comunicación sea fluida y eficiente y poder acompañar al emprendedor en cada una de sus etapas de crecimiento y expansión.
Juan Manuel Barrero
Socio de Barrero & Larroudé
